BIENVENIDOS

Quiero hacer un homenaje al primer Gobernador de esta ínsula llamada Barataria: D. Sancho Panza. Por lo tanto, con su debido permiso y siguiendo sus pasos voy convertirme en el segundo Gobernador de esta ínsula e intentar convertirla en un reducto de cultura, algo que hoy en día escasea. Así que todos aquellos que esteis interesados en visitar este lugar: SED BIENVENIDOS.

domingo, 7 de agosto de 2022

UNA CALLE A SAUL BELLOW

Vamos a dedicarle una calle al gran escritor canadiense Saul Bellow que recibió en 1976 el Premio Nobel de Literatura


                          



Nació en 1815 en Lachine (Canadá) pero se crió y educó en Chicago. Entre sus obras destacan: Las aventuras de Augie March con quien obtuvo el National Book Adward en 1964, Carpe Diem, Henderson, el rey de la lluvia, Herzog, El legado de Humboldt que fue Premio Pulitzer en 1975 o Ravelstein

Es judío y en sus obras suele hablar de las vivencias y sufrimientos de los judíos asentados en ciudades como Chicago o Nueva York.

Desde muy pequeño su madre lo metió a clases de hebreo ya que deseaba que fuera rabino.

En 1923 tuvo tuberculosis lo que le llevó a estar seis meses hospitalizado. Diez años más tarde muere su madre, sufriendo el escritor una gran conmoción

Él estudió en la Universidad de Chicago y en la de Northwestern y se licenció en 1937 con las mejores notas. Se va a Nueva York tomando contacto con círculos literarios. Hizo reseñas para periódicos y revistas y trabajó para la Enciclopedia Británica

En 1938, se casó por primera vez, se casó cinco veces, con Anita Goshkin y se fueron a vivir a Chicago en casa de los padres de ella y comienza a escribir El hombre en suspenso. Después de escribir esta obra formará parte de la tripulación de un mercante y tuvo a su primer hijo

En 1947 publica su segunda novela La víctima

Consigue trabajar como lector en la Universidad de Minnesota y posteriormente se va a París con la beca Guggensheim

En 1956 se casa con su segunda esposa, Alexandra Tschacbasov y en 1961 con la tercera, Susan Glassman.

En 1964 estrena una obra teatral en Bordway: The last Anlysis que resultó un fracaso.

En 1967 cubre la Guerra de los Seis Días en Israel para "Newsday Magazine" y al año siguiente publica su primera colección de cuentos, Las memorias de Mosby y otros relatos, además en este año se divorcia de su mujer y recibe la Cruz Francesa de Caballero de las Artes y las Letras y el galardón B´Nai Brith Award.

En 1969 publica El planeta de Mr. Sammler, desencadenando una gran enemistad entre los sectores más izquierdistas de Estados Unidos, que lo califican de misógeno, racista y archiconservador. De hecho en 1970 fue abucheado por estudiantes radicales en San Francisco

En 1974 se casa con la matemática rumana Alexandra Ionescu y dos años después publica el reportaje "Jerusalén, ida y vuelta" considerado sionista

En 1982 publica El diciembre del decano y posteriormente Son más los que mueren por desamor, Theft, La conexión Bellorosa y La verdadera

En los 90 se casa con Janis Freedman y sobrevive a una intoxicación de pescado tomado en el Caribe

Muere el 5 de abril de 2005 con 89 años

A continuación un fragmento de su obra Carpe Diem:

"Una vez más, el vetusto violinista le apuntó con el arco cuando pasó deprisa frente a él. Wilhelm no le dio limosna y se negó a ver cualquier presagio. Se abrió camino pesadamente a través del tráfico, y con sus pasos cortos y rápidos, subió la escalera de entrada del hotel Gloriana, con sus espejos oscuros, tan benévolos con los defectos de la gente. Desde el vestíbulo, telefoneó a la habitación de Tamkin, y al no tener respuesta, subió en ascensor. Una mujer de unos cincuenta años, con colorete y una estola de armiño, llevaba de la correa a tres perritos diminutos, unas criaturas nerviosas de negros ojos saltones, como ciervos enanos, y patas como palillos. Era la estonia excéntrica que habían trasladado con sus animalitos al piso doce. Reconoció a Wilhelm.
-Usted es el hijo del doctor Adler-dijo.
Con cierta ceremonia, él asintió.
-Soy una buena amiga de su padre.
Él se quedó parado en el rincón sin mirarla de frente; ella pensó que quería hacerle un desaire y tomó nota mentalmente para decírselo al doctor.
El carrito de la ropa blanca estaba ante la puerta de Tamkin, y la llave de la doncella con su gran lengua de latón sobresalía de la cerradura.
-¿Ha venido el doctor Tamkin? -le preguntó.
-No, no lo he visto."

No hay comentarios:

Publicar un comentario