BIENVENIDOS

Quiero hacer un homenaje al primer Gobernador de esta ínsula llamada Barataria: D. Sancho Panza. Por lo tanto, con su debido permiso y siguiendo sus pasos voy convertirme en el segundo Gobernador de esta ínsula e intentar convertirla en un reducto de cultura, algo que hoy en día escasea. Así que todos aquellos que esteis interesados en visitar este lugar: SED BIENVENIDOS.

domingo, 1 de diciembre de 2013

MANUEL AZAÑA

Voy a ponerle el nombre de Manuel Azaña a una de las calles de esta Ínsula. Sé que es un personaje controvertido y que tiene muchos detractores, al igual que muchos defensores. Pero yo quiero dedicársela por su labor de escritor y no de político. No voy a valorar sus ideas políticas, solo quiero valorar su labor literaria, de hecho en 1926 obtuvo el Premio Nacional de Literatura por su obra Vida de don Juan Valera. Por lo tanto no estamos ante el típico político que se dedica a escribir sus memorias para ganar dinero, de hecho tenemos dos casos recientes y de dos ex presidentes: Aznar y Zapatero, que no creo que vayan a recibir un premio por sus libros y tampoco creo que lleguen a destacar por sus libros.
 
Azaña nació en 1880, dedicándose durante su vida a la literatura y a la política(faceta más conocida). Durante la Restauración estuvo en el partido político UDE que fue un fracaso y que lo mantuvo apartado de la política un tiempo, dedicándose al periodismo en París. Con la dictadura de Primo de Rivera vuelve a España y fundó Acción Republicana. Es la época en la que escribe varias obras como: La novela de Pepita Jiménez. Proclamada la República, fue Ministro de la Guerra. En 1933 crea con Marcelino Domingo, Izquierda Republicana, partido con el que consigue la jefatura de gobierno y la presidencia de la República que finaliza con la Guerra Civil. Así se tiene que exiliar en Francia y muere en 1940.
 

                                                  
 
Quiero mostrar un pequeño ejemplo de su obra con este breve fragmento de su obra Plumas y palabras, donde hace una reflexión sobre la sociedad española de su época:

"Con ser tan violenta y natural, ninguna aspiración es más precaria, ninguna apetencia del espíritu depende tanto del asentimiento ajeno. Otras pueden saciarse fuera de la sociedad, en contra suya, a sus espaldas. Para ser libre, la sociedad es necesaria; y nadie lo es si la sociedad no lo consiente. Imagino que los españoles (este. pueblo se caracteriza por su independencia altanera) abundan en mis inclinaciones. Libertad es el objeto; liberalismo es el modo. Quien lo detesta o lo rechaza, no renuncia a ser libre: se opone, sencillamente, a que lo sea yo. Cada cual concibe la sociedad en que desearía vivir, proporcionando a sus aspiraciones el cauce más llano. La España política, según mi traza, seria una asociación democrática, regida con humanidad."

No hay comentarios:

Publicar un comentario