BIENVENIDOS

Quiero hacer un homenaje al primer Gobernador de esta ínsula llamada Barataria: D. Sancho Panza. Por lo tanto, con su debido permiso y siguiendo sus pasos voy convertirme en el segundo Gobernador de esta ínsula e intentar convertirla en un reducto de cultura, algo que hoy en día escasea. Así que todos aquellos que esteis interesados en visitar este lugar: SED BIENVENIDOS.

domingo, 6 de septiembre de 2020

MAXIM HUERTA HERNÁNDEZ, ¿ESCRITOR O FAMOSO?

 Queremos proponer un debate en el que me encantaría que todos ustedes opinaran, ¿podemos considerar a Maxim Huerta un escritor o bien es un famoso de la televisión que se ha dedicado a escribir libros?

Yo voy a dar datos sobre su vida y después son ustedes los que pueden opinar. Maxim Huerta nació en Utriel, Valencia en 1971. Se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad CEU San Pablo de Valencia. Comienza a trabajar en la radio y diversos medios escritos para pasar en 1997 a Canal 9. En 199 comienza a trabajar en Telecinco, en Informativos. En el 2005 se incorpora a "El programa de Ana Rosa".

Es miembro de la Academia de las Ciencias y las Artes de la Televisión.

Entre sus obras destacan: Que sea la última vez..., El susurro de la caracola, Una tienda en París o La noche soñada con la que obtuvo en el 2014 el Premio Primavera

En el 2018 fue nombrado Ministro de Cultura y Deporte, presentando su dimisión una semana después al saberse que eludió el pago a Hacienda de una cantidad de 365.93,85 €. Regresó al mundo de la televisión donde presentó en la 1 de TVE, el programa "A partir de hoy" hasta marzo del 2020.

    

                         


A continuación un fragmento de La noche soñada:

" Abrí las puertas de la entrada y contemplé la calle. La sensación de libertad y amor que proporciona tener un destino es incomparable con nada; salí de allí después de ver resucitar a las mujeres de mi casa y con la vida como rumbo en mi hoja de ruta: ella ¿Por qué no había de hacerme caso? ¿Por qué aquella chica extranjera de flequillo al viento no iba a girarse alguna vez hacia la valla de mi jardín? ¿Por qué no, en uno de sus compases al norte, al sur, al este y al oeste, inba a tropezarse con mi mirada? Tenía mi magdalena para ella. Mi felicidad era comparable a la levadura que había hecho estallar aquella masa de azúcar, harina y ralladura de limón. Yo iba en esa bolsa. Entregársela en secreto, otra vez, en su puerta, era como entregarme yo"

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