AÑO INTERNACIONAL DE LA AGRICULTURA FAMILIAR

Este año está dedicado a la agricultura familiar, un tema, el de la agricultura, tratado en muchas ocasiones en la literatura. Por eso, me gustaría recordar algunos libros donde aparece este tema.

 

Así en El alimento de los dioses de Gonzalo Moure, un descubrimiento tan importante como el cultivo de un vegetal al que le llamarán la patata del cielo, desencadenará el fin de la tierra tal como la conocemos nosotros:

 

"Se cultivaba con facilidad en casi todos los climas, era abundante y no perdía cualidades. En muy pocos años había llegado a todos los rincones del globo, y la salud mundial había experimentado una mejoría asombrosa que se empezaba a traducir ya en un aumento vertiginoso de la natalidad, sobre todo en las áreas más pobres del planeta, repentinamente embriagadas de proteínas y vitaminas"

 

Autores de la talla de Lope de Vega  también trataron este tema en sus obras, así en Fuenteovejuna algunos de sus personajes principales son labriegos y hablan de sus trabajos:

"Ellos en el sembrar nos ponen tassa:
  daca el trigo, cebada y las legumbres,
  calabaças, pepinos y mostazas...
  ¡Ellos son, a la fe, las calabaças!"

Emilia Pardo Bazán en su obra La madre Naturaleza también cita productos que los propios personajes extraen del campo:

"Por un ventanillo, abierto en el testero, entraban las avispas a comerse los gajos de cerezas maduras que andaban rondando sobre la artesa; y si fuese posible prestar oído a unas trotadas menuda que allá arriba resonaban, se comprendería que los ratones no andaban remisos en dar cuenta del poco maíz restante de la cosecha anterior, ni de cuanto encontraban al alcance de los dientes"

Miguel de Unamuno en su obra San Manuel Bueno, mártir cuenta como el personaje principal ayuda en las labores del campo:

"En la temporada de trilla íbase a la era a trillar y aventar, y en tanto les aleccionaba o les distraía"

Andrés Hurtado personaje de El árbol de la ciencia de Pío Baroja se va a un pueblo manchego y en él se describirá lo que los habitantes de ese pueblo hacen cada día:

"La mañana comenzaba a sonreír en el cielo; el sol brillaba en los viñedos y en los olivares; las parejas de mulas iban a la labranza, y los campesinos, de negro, montados en las ancas de los borricos, les seguían"

En la actualidad también tenemos obras donde el tema de la agricultura está presente, así en la obra de Almudena Grandes, El lector de Julio Verne uno de sus personajes fue jornalero del campo:

"Cuando me la enseñó por primera vez, madre me explicó como era aquella casa que habían alquilado en Valderrubio, un pueblo de Granada rodeado de plantaciones de remolacha, con varias fábricas de azúcar que pagaban el trabajo de un obrero serio y cumplidor mejor que los terratenientes de Valdepeñas, y sin necesidad de capataces que fueran todos los días a la plaza del pueblo a humillar a los hombres señalándoles con el dedo, hoy trabajas tú, hoy tú no trabajas..."

Por último debemos hacer mención al Quijote de nuestro queridísimo Cervantes cuyo personaje principal Don Quijote era un hidalgo con tierras para cultivar:

"Es, pues, de saber, que este sobredicho hidalgo, los ratos que estaba ocioso- que eran los más del año-, se daba a leer libros de caballerías con tanta afición y gusto, que olvidó casi de todo punto el ejercicio de la caza, y aun la administración de su hacienda; y llegó a tanto su curiosidad y desatino en esto, que vendió muchas hanegas de tierra de sembradura para comprar libros de caballerías en que leer..."

Este es un pequeño ejemplo de la cantidad de obras literarias que hacen referencia a la agricultura.